Una columna resalta la vigencia del modelo en la lechería chilena.
El modelo cooperativo, basado en la gestión democrática y la equidad, se presenta como una vía sólida y sostenible para crear y consolidar empresas, enfocándose en el bienestar colectivo y la innovación social.
Una columna de opinión en el Diario Lechero destaca el modelo cooperativo como una alternativa de negocio viable para la creación de empresas sostenibles. El texto, escrito por Claudia Vargas García, con la perspectiva de Cristóbal Santa Cruz, de Cooperativas del Sur, subraya que este modelo se basa en valores de equidad, solidaridad y participación activa, a diferencia de las empresas tradicionales donde el poder reside en el capital.
La esencia de una cooperativa es que sus socios son a la vez propietarios y usuarios, lo que se refleja en el principio de “un socio, un voto”. La misión de estas organizaciones va más allá de la rentabilidad económica, ya que buscan satisfacer necesidades colectivas y contribuir al desarrollo de la comunidad. El artículo resalta que las cooperativas han sido pioneras en la reinversión de utilidades en desarrollo e innovación social, anticipándose a la tendencia global de la sostenibilidad.
Sin embargo, el texto también aborda los desafíos del modelo, como las dificultades para acceder a financiamiento, la escalabilidad y la necesidad de una formación de liderazgo. Para superarlos, se propone fortalecer las redes de colaboración, digitalizar los procesos y fomentar la cooperación entre diferentes sectores.
En conclusión, el artículo sostiene que el modelo cooperativo es una herramienta poderosa para construir sociedades más inclusivas y resilientes. Demuestra que es posible tener empresas exitosas sin sacrificar el bienestar de la comunidad ni el equilibrio ambiental.
Fuente: Diario Lechero