Si no hay imprevistos, a fin de mayo saldrán al mercado los Valores Representativos de Deuda, VRD en la jerga bursátil, que emitirá el fideicomiso de SanCor en busca de los millones que necesita para rescatar a la láctea de su crisis financiera.
Los títulos tendrán cotización pública (y por eso podrán ser suscriptos por inversores privados, además de los fondos que se comprometió a aportar el gobierno nacional) y estarán respaldo por los activos de la cooperativa.
La preparación de los VRD, que es un proceso muy riguroso, estará lista en dos semanas y están participando en su confección empresas de mucho prestigio en el mercado. Una de ellas es First Capital Group, especializada en finanzas corporativas que en los últimos años estructuró más de 1.400 operaciones securitizadas por más de $ 100.000 millones. Y la otra es el estudio de abogados Nicholson y Cano, que es el principal estudio jurídico del país en asesoramiento de empresas que incurren por el mercado de capitales. También está participando el banco Bice, que será el fiduciario de los VRD. Además, hay dos calificadoras de riesgo internacional que analizarán el producto estructurado. Y, precisamente, cuando se termine la etapa de cumplimiento de requisitos y condiciones, los VRD serán enviados a la Comisión Nacional de Valores (CNV) para su aprobación.
El uso de VRD y no de un simple préstamo, la talla de las empresas que realizan la confección del título, el control de CNV y la oferta pública de los bonos (lo que indica transparencia en el acceso a la información) y la segura participación de inversores privados son todos requisitos acordados entre los empresarios impulsores del fideicomiso y el gobierno nacional para marcar fundamentales diferencias entre el financiamiento que busca Sancor del que tuvo Vicentin en la administración de Mauricio Macri.
En efecto, la aceitera recibió cientos de millones de dólares del Banco Nación de manera totalmente irregular (violando estatutos como las nuevas autoridades del banco denunciaron en la Justicia) y poco transparente (favores políticos de puertas cerradas entre el macrismo y los Vicentin) que dejaron la entidad pública como principal acreedor del mayor default en la historia del mercado de granos. Y es que, precisamente, para no repetir casos como Vicentin es que ahora se toman tantos recaudos.
Fuente: Rosario3