Costos adicionales de suplementación y una caída de remisión llevaría a pérdidas de en torno a US$ 100 millones para la lechería, de acuerdo a las estimaciones realizadas por la Oficina de Programación y Política Agropecuaria del MGAP (OPYPA).
Las pérdidas por aumento de costos de suplementación estarían entre US$ 58 y US$ 65 millones al año. Mientras que la remisión, que se estima podría caer en torno a 5%- representaría una pérdida de unos US$ 40 millones.
La regional de Canelones, en la última reunión de la Agremiación de Tamberos de Canelones, se manejó que la remisión se encuentra un 7,3% debajo del año pasado. “Acá ya está pegando fuerte y financieramente ni que hablar”, dijo a Conexión Agropecuaria Justino Zavala, directivo de ATC. “Los US$ 100 millones no están fuera de la realidad”, apuntó.
Fabián Hernández, de la Sociedad de Productores de Leche de Florida, señaló que “es un perder día a día y cada día está peor”, con reservas que caen día a día, aumentando el uso de concentrados, en una época de comienzo de los pre parto, animales que “para que la lactancia exprese su potencial no se pueden enterar que hay seca, es un gastar constante”, dijo.
Las importaciones de suplementos en 2022 fueron de las más elevadas históricamente (tanto en volumen como en precio), señaló el informe de Opypa, con US$ 56 millones de importaciones de suplementos entre octubre 2022 y enero 2023, un salto de 63% frente al año anterior y 49% más que el promedio de los tres periodos previos.
Fuente: Blasina y Asociados