Fonterra vende sus marcas de consumo a Lactalis y se reenfoca en los negocios de foodservice e ingredientes de alta rentabilidad, en medio de un mercado global cambiante y desafíos económicos
La cooperativa láctea neozelandesa Fonterra vende su negocio de marcas de consumo a Lactalis, reenfocándose en los sectores de foodservice e ingredientes de alto margen —todo esto en medio de un panorama global cambiante y crecientes desafíos económicos
La cooperativa neozelandesa vende sus queridas marcas de consumo para concentrarse en foodservice e ingredientes de alto margen.
En una decisión que representa un cambio significativo en su estrategia a largo plazo, Fonterra ha decidido vender su negocio de marcas de consumo, incluyendo nombres emblemáticos como Anchor y Mainland, al gigante lácteo francés Lactalis. Aunque la decisión difícilmente fue tomada a la ligera, dado el fuerte vínculo histórico de estas marcas con la industria láctea de Nueva Zelanda, se trata de una elección calculada con base en la realidad económica.
La junta de la cooperativa concluyó que los riesgos y costos de gestionar el negocio de marcas de consumo superan los retornos, y que el capital liberado podría emplearse de forma más provechosa.
El cambio estratégico se impulsa para reenfocarse en sus segmentos más rentables: ingredientes sofisticados y foodservice.
En el ejercicio financiero de 2025, estas dos divisiones entregaron un retorno sobre el capital superior al del negocio de marcas de consumo. En particular, el sector de foodservice experimentó un crecimiento explosivo en mercados clave como China, con un aumento interanual de USD 100 millones y un impresionante retorno sobre el capital del 19,6 %.
La venta a Lactalis, valorada en USD 3 845 millones, destaca el compromiso del grupo con este nuevo modelo más enfocado. El negocio de marcas de consumo es descrito como complejo y costoso de gestionar, con una huella pequeña según estándares internacionales: más de 20 productos con marca vendidos en más de 20 países. Al vender esta parte, Fonterra está optimizando sus operaciones y liberando capital para apuntar a oportunidades de mayor crecimiento.
Una respuesta pragmática a un entorno global volátil; la nostalgia queda de lado.
Esta redirección estratégica también responde a un panorama global que es cada vez más volátil, nacionalista y proteccionista. En lugar de competir en un mercado de consumo cada vez más complejo, Fonterra apuesta por sus fortalezas como proveedor líder de ingredientes lácteos de alta calidad y socio estratégico en el sector foodservice, especialmente en China.
En última instancia, se trata de evolucionar para mantenerse rentable. Aunque puede haber una pérdida sentimental para los productores que sienten una fuerte conexión con estas marcas históricas, parece haber un clima de confianza y respaldo a la decisión del directorio. El dividendo especial propuesto de USD 2 por acción también ayudará a los accionistas, muchos de los cuales son productores, a reducir deudas. Esta medida indica que el futuro de la cooperativa se basa en el pragmatismo económico, no en la nostalgia.
Fuente: eDairyNews