Teniendo en cuenta que los precios se encuentran en niveles históricamente altos, pequeñas correcciones a la baja resultan saludables para el mercado, en el sentido que los ajustes podrían ser más fuertes en momentos de alta incertidumbre, explicó.
“Hoy los fundamentos de oferta y demanda no dan indicios de que los precios vayan a tener cambios significativos en los próximos meses. Pero el contexto internacional con el conflicto Rusia-Ucrania, con sus efectos sociales, políticos y económicos, adiciona un factor de inestabilidad para la evolución de los precios en los próximos meses”, indicó el Inale.
La última subasta
La LPE (leche en polvo entera) ajustó a la baja en 2,1% lo que no sorprende registrando en promedio US$/ton 4.596. Es probable que los compradores de África y Medio Oriente no se han asegurado en LPE como lo han hecho en los eventos anteriores. Los precios que se fijaron en esta licitación para las compras de los próximos seis meses cayeron en todos los meses excepto para julio. No obstante, los precios a futuro se encuentran en un nivel relativamente estable.
El precio de la LPD (leche en polvo descremada) no se detuvo, con un incremento de 1,6%, precios que no se veían desde 2013-2014. Se destaca que la Unión Europea compró LPD en esta licitación, siendo uno de los principales oferentes mundiales de este producto. Esta situación refleja lo recortada que está la oferta de producción de leche en Europa. También los precios a futuro se mostraron relativamente estables.
En tanto, la manteca ajustó 1,8% a la baja, después de la gran carrera de los precios: en octubre de 2021 se situó en US$/ton 4.900 y en marzo 2022 rozó US$/ton 7.000, experimentando un crecimiento de 45%. Los contratos a futuro muestran que por el momento no se pasa la barrera de los US$/ton 7.000. Los precios se van a situar en ese rango para los embarques de manteca de los próximos seis meses, según el Inale.
Fuente: Tardaguila