El responsable del sector lácteo en UU.AA, Óscar Pose, dijo que “las pocas que han llegado” son ofertas a largo plazo, a un año, y “normalmente a la baja”, circunstancia que, evidentemente, inquieta a los productores, especialmente a los propietarios de las granjas pequeñas, que aspiran a reducir el diferencial de precio con aquellas que tienen un elevado volumen de producción en los nuevos contratos.
Pose opina que, en las actuales circunstancias, “lo normal sería una renovación de contratos con mantenimiento de precios”, porque en este momento no hay motivos que justifiquen una bajada, como tampoco los hay para reclamar una subida, salvo, precisamente, en el caso de las explotaciones más pequeñas.
“No hay motivos para justificar una bajada de precio en origen. El precio sigue alto en la distribución. Además, la producción empieza a recuperarse, pero muy poco a poco”, dijo el portavoz sindical.
“Es cierto que el precio de la leche en polvo y de la mantequilla”, que se utilizan para la fabricación de productos industriales, “está más bajo que el año pasado”, pero no es suficiente para justificar una “bajada en origen que desplome el precio de la leche en origen”. Todos, reconoció, productores e industrias, están a la espera de ver “cómo evoluciona la actual situación”, porque existe “una gran incertidumbre” en el sector.
Fuente: Inter Empresas