Ercole Felippa, presidente del Centro de la Industria Lechera (CIL), manifestó que la implementación del Dólar Soja III es para el sector lácteo “el tiro en la nuca que faltaba”.
“La sequía no es culpa de nadie. Pero hay una serie de acciones que son auto infringido. En nuestra actividad hay números que se tornan en una actividad inviable. Ya sea para producir o para industrializar”, manifestó.
Agregó que “hablando de números, los precios en los últimos tres últimos años, vemos que los precios minoristas, según el INDEC aumentaron un 362% para el consumidor y los precios mayoristas aumentaron un 258%, tenemos un 104% de diferencia. Esto pone de manifiesto que toda esta política de control de precios solo genera distorsión y transferencia de recursos de un eslabón a otro a otro. En tanto, los costos industriales crecieron un 354%».
«Con este panorama es muy difícil trasladarle un mejor precio al productor ”, manifestó.
Por ello, si el gobierno promueve una tercera edición del Dólar Soja, “esto pega directamente sobre la línea de flotación” de todo el sector lácteo “luego de la sequía y la situación desfavorable con el precio de los granos”, aseguró Felippa.
El industrial manifestó que el Impulso Tambero solo alcanza «al 25% de la leche que se produce en el país, se anunció en enero y estamos en abril y solo se cobró una única cuota».
Fuente: Infortambo