Ya pasaron 26 años desde la realización del último Congreso Lechero CREA. ¿Qué motivó a la Comisión de Lechería de la asociación a repetirlo en 2023? ¿Cómo lo pensaron, a quiénes se dirige y qué temas se estarán abordando? Para conocer más acerca del encuentro que reunirá, durante una jornada y media, a la comunidad lechera argentina en el Salón Puerto Norte de Rosario, conversamos con el empresario José “Pepe” Quintana, miembro del CREA Tambero Ameghino Villegas y presidente del congreso.
-¿Qué los motivó a organizar un congreso después de tanto tiempo y en un escenario tan complejo?
-Ante todo, creo que nos lo debíamos. ¿Cómo puede ser que haya pasado tanto tiempo sin que tuviéramos un congreso en el que nos reuniéramos todos? Después de la pandemia, especialmente, se sintió mucho esa necesidad. Entonces, uno de los motivos principales de este congreso es el reencuentro. Otra razón es que CREA está llevando adelante muchos proyectos interesantes para el sector y está en nuestro espíritu compartirlos, tanto hacia adentro, a los integrantes del Movimiento, como hacia afuera, a todos los productores y técnicos que tengan interés en estos temas. Por eso, será un congreso abierto a todo público.
Si bien el foco es el empresario, consideramos que muchos de los temas que se abordarán serán de interés para todos los que, de una forma u otra, participan en la cadena: los asesores, los equipos de trabajo. Van a haber, incluso, muchos aspectos atractivos para las nuevas generaciones. Es decir que, dentro del universo lechero, abarca a todo el mundo.
-¿Qué va a pasar a lo largo de ese día y medio?
-El primer bloque del congreso se llama “Todo para crecer”. Allá por 2011, en el Congreso Tecnológico CREA, Marcos Gallacher, director del Departamento de Economía Agrícola, Agronegocios y Recursos Naturales de UCEMA presentó un trabajo donde mostraba que la brecha de productividad entre los tambos argentinos estaba determinada fundamentalmente por la gestión. Es decir que la razón por cual dos productores que implementaban el mismo paquete tecnológico obtenían resultados muy diferentes estaba dada por su capacidad para gestionarlo.
Lo que hicimos entonces fue trabajar sobre los datos obtenidos a lo largo de estos 11 años para sacar nuevas conclusiones. Ahora queremos analizar qué rol desempeña el empresario, porque la conclusión del primer trabajo hablaba únicamente de la “gestión”. Achicar la brecha productiva es un aspecto fundamental para evitar el cierre de tambos; es uno de los factores que más productores saca del sistema.
-Ese trabajo fue un gran disparador para empezar a cambiar el foco, ¿verdad?
-Sí, fue bastante revelador. Es de la mano de esos resultados que dejamos de hablar de la vaca para enfocarnos en la gente. Fue así que surgió, dentro del ámbito de la Comisión de Lechería de CREA el proyecto Factor Humano Tambo, liderado por Fernando Preumayr. Pero vimos también que el factor humano no alcanzaba para reducir la brecha, entonces hicimos foco en el aspecto empresarial, lo que más tarde daría lugar al proyecto Tambo en Foco. En el medio aparecen el proyecto Purines y el bienestar animal como temas estrechamente vinculados con la demanda.
Tambo en Foco vuelve sobre el tema de la brecha porque, precisamente, se trata de aprender de los mejores para achicarla. Los productores nos preguntamos: ¿cómo hacen las cosas aquellos que las hacen bien? De esa manera, logramos identificar ciertos aspectos, que son críticos para la rentabilidad de los tambos: alimentación pastoril, alimentación TMR y cría y recría. A partir de allí, los asesores detectaron qué tambos podían ser considerados referentes en cada uno de esos procesos.
En el Congreso vamos a presentar el testimonio de esos empresarios para escuchar de primera mano cómo hacen ellos para alcanzar esos niveles de excelencia. Cuando uno mira cómo les va a los que les va muy bien en los distintos procesos, se da cuenta lo mucho que hay para crecer todavía.
-El segundo bloque está planteado como un viaje a la lechería del futuro”…
Para llegar al futuro hay que superar el presente y para hacerlo hay que tratar de mejorar en lo que se pueda, esa es la intención del primer bloque. En la segunda parte se va a hablar de tecnologías, de la inteligencia artificial y su impacto en el tambo, de bienestar animal, de medio ambiente, y del modo en que todo esto es atravesado por la imagen que la sociedad tiene de la actividad, para entender cuáles pueden ser las demandas a futuro. Porque todo lo que hagamos de ahora en más va a ser interpelado por la sociedad, mucho más de lo que fue hasta ahora. O sea, los tambos del futuro van a estar permanentemente en la mira.
También va a haber un espacio para los miembros del CREA de Tambos Robot, un grupo inédito en el Movimiento, y para las “Empresas 360”, que no son reconocidas por un aspecto en particular, sino por su capacidad para desarrollar una visión integral del negocio, tanto “tranqueras adentro” como “tranqueras afuera”.
-¿Cómo piensan vincular estos temas con los vaivenes climáticos y económicos?
-Si nos detenemos únicamente en lo que el empresario tiene que hacer, alguien puede llegar a decir: “No soy un robot, soy una persona”. Entonces, sobre el cierre, vamos a contar con el filósofo Alberto Berro, quien nos va a hablar de la importancia de nuestra actitud ante la adversidad.
Quien ha leído algún trabajo de él sabe que sus enseñanzas le servirán al empresario para hoy y para siempre, porque aplican a la vida misma.
-Para ir cerrando, ¿por qué creés que toda persona vinculada a la cadena láctea debería asistir al congreso?
-Fundamentalmente, porque CREA tiene mucho para mostrar y para decir en línea con la posibilidad de achicar esa brecha productiva de la que hablábamos, con la profesionalización que caracteriza al Movimiento. Y después, porque todo va a estar aterrizado a la vida real. Por estas y otras razones, los esperamos en el Congreso Lechero CREA para juntos ver, sentir y hacer.
Informes e inscripción aquí: https://congresolecherocrea.org.ar