El año 2022, no tuvo tregua en lo económico para el sector lechero del país y de la provincia. Según consignó el Austral de Osorno, pese al alza en los precios por litro de leche pagados al productor, el alza en los insumos, la inflación y factores internos, provocaron un balance negativo para el área.Además, una de las consecuencias del encarecimiento de costos es la baja sostenida por seis meses en la producción, lo que significa obviamente un descenso también en la recepción de leche cruda de la industria.
De acuerdo a los datos entregados por la Federación Nacional de Productores de Leche (Fedeleche), basados en información de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa.
La recepción nacional de leche cruda entre enero y noviembre de 2022 mostró un 2% de disminución en comparación al mismo periodo del año anterior, bajando de 2.031,0 a 1.989,9 millones de litros, volúmenes que representan una contracción interanual de 41,0 millones de litros.
Además de esta baja en la producción lechera, las perspectivas para este rubro decaerían este 2023, tanto en la producción como en el precio, además del número de productores, al tratarse de un negocio complejo en la actualidad, según se desprende del último estudio realizado por el IX Observatorio Lácteo Nacional, ejecutado por Fedeleche, con el apoyo de la Universidad de Los Lagos (ULagos).