En medio de una situación cada vez más tensa, más de cinco puntos de bloqueo han paralizado completamente el transporte de carga y pasajeros en el departamento del Cesar. Los municipios del sur y la capital, Valledupar, son epicentros de un caos que afecta a miles de personas diariamente, entre largas filas de camiones y vehículos particulares varados a las entradas y salidas de las ciudades.
La Ruta del Sol, eje principal del transporte en el César, se ha convertido en un escenario de restricciones y bloqueos que varían en intensidad: algunos son totales, otros son parciales y permiten el paso con restricciones a la movilidad.
En medio de esta situación, Eudes Antonio Garzón, médico veterinario zootecnista y profesional de Fedegán – FNG en la región de La Guajira y el Cesar, explica a este medio que se ha habilitado un corredor humanitario para el tránsito de ambulancias y personas que requieren atención prioritaria, un fresquito de alivio en medio de una situación desesperante.
Para los productores agropecuarios del Cesar, la situación se ha convertido en una pesadilla.
La parálisis del transporte impacta directamente la cadena de producción y distribución de alimentos, un sistema delicado que depende casi exclusivamente del transporte desde el campo hacia los centros de consumo. Cada día de bloqueo aumenta el riesgo para los ganaderos, quienes ya operan con márgenes de ganancia reducidos.
De acuerdo con Garzón, los ganaderos, en particular, expresan una profunda preocupación ante el alza incesante del precio de los combustibles, especialmente Aceite Combustible para Motores (ACPM). El incremento en los costos del transporte se traduce en un aumento de los precios al consumidor, una cadena que termina afectando a la economía del productor, quien se encuentra atrapado en un ciclo de costos crecientes y utilidades disminuidas.Uno de los sectores más golpeados por el paro de camioneros es el de la producción de leche. La recolección del producto, una operación que depende del transporte diario hacia las plantas procesadoras, enfrenta el riesgo de ser suspendida.
Con los bloqueos en puntos clave, muchas empresas recolectoras y compradoras de leche se ven limitadas para llegar a las fincas, obligando a los ganaderos a buscar alternativas improvisadas para evitar el desperdicio de su producción.
En medio de esta encrucijada, Garzón asegura que los productores han tenido que ingeniárselas para vender la leche a precios reducidos, en muchos casos muy por debajo de los costos de producción. Otros ganaderos han recurrido a la fabricación de queso, una actividad para la cual no todos están capacitados, pero que se presenta como una opción para darle salida a la leche en medio de la crisis.
Los ganaderos hacen hasta lo imposible, improvisando y adaptándose a una situación que parece no tener solución a corto plazo, pues las conversaciones entre el Gobierno Nacional y los camioneros y afectados por el alza del ACPM, no han mostrado un acuerdo o consenso.
Fuente:https://www.contextoganadero.com