Como explica Michel A. Wattiaux, del Instituto Babcock en la Universidad de Wisconsin-Madison, en su artículo, el productor lechero que esté pensando en sus objetivos de selección debe considerarlos cuidadosamente teniendo en cuenta su situación en particular.
«Fundamentalmente, la meta de selección es la de obtener vacas más deseables, vacas que le den al productor la más alta rentabilidad», precisó. En consecuencias, detalló que hay 3 grandes características que hacen a las vacas lo más rentables posible:
- Producción de grandes cantidades de leche en cada lactancia.
- Longevidad (muchas lactancias).
- La leche producida posee el valor de mercado más alto.
En principio, vacas con producciones más altas son más rentables porque requieren menos alimento por unidad de leche producida que aquellas con menor producción de leche.
Así pues, el valor de mercado de la leche es un factor importante para incluir al definir las metas de selección. Mientras que los dos primeros factores son biológicos y comunes a todas las vacas del mundo, el precio de la leche en el mercado varía entre países y regiones.
Según la forma como se establece el precio de la leche en cada zona, la estrategia más rentable para un productor lechero puede ser la de seleccionar vacas que producen:
- El volumen más alto de leche sin tener en cuenta la composición.
- El volumen más alto de leche y cantidad de grasa.
- La mayor cantidad de grasa y proteína sin tener en cuenta el volumen de leche en sí.
- La mayor cantidad de grasa y proteína en el menor volumen de leche.
El autor precisa que la estrategia de selección debe establecerse para largo plazo y que las metas que se mantienen a lo largo de los años producen mejores resultados por el efecto acumulativo sobre las generaciones sucesivas. Además, la ganancia genética es mayor con el paso del tiempo.
¿Cuántos rasgos deben incluirse?
Wattiaux advierte que cuando la selección se realiza para más de un rasgo, la ganancia genética es menos rápida que si se hace sobre uno solo. En general se elige más de un rasgo, pero hay que tener en cuenta que a medida que se incrementa el número, al mismo tiempo se reducirá el índice de mejoramiento genético.
El Cuadro muestra la pérdida a medida que se agregan rasgos al programa de selección. Por ejemplo, si la decisión de selección se basa en dos rasgos, el progreso genético de cualquiera de los dos rasgos será de solo el 71% del progreso que se puede realizar cuando un solo rasgo se selecciona individualmente.
Número de rasgos | 1 | 2 | 3 | 4 | 5 | 6 | 7 |
Ganancia relativa (%) | 100 | 71 | 58 | 50 | 45 | 41 | 38 |
Además, cuando se decide que rasgo debe seleccionarse y cuál es el peso relativo que debe tener cada rasgo en el programa de selección, recuerde la correlación que existe entre rasgos. La correlación trae cambios en otros rasgos que algunas veces son significativos.
Fuente: CONtexto Ganadero