El Consejo Mundial del Dulce de Leche es una entidad global, que está conformada por diversos representantes del sector lechero, principalmente de pequeñas y medianas empresas, además de profesionales del sector lechero de distintos lugares del mundo.
En un comunicado se informó que “el Consejo Mundial del Dulce de Leche ya es una Asociación Civil con personería jurídica, que recientemente ha renovado sus autoridades. EL CMDDL está conformado por asociados de varios países, que realizan reuniones virtuales para tratar distintos temas relacionados al Dulce de Leche.Tiene además comisiones de trabajo, por temas específicos y pronto empezara a desarrollar actividades públicas para los que quieran participar y se informara a través de redes sociales”.
La nueva directiva del Consejo Mundial del Dulce de Leche quedó conformada de la siguiente manera:
Presidente: Ivana Nieto
Secretario: Angel Cassanello
Tesorero: Claudio Novaresio
Vocal: Darío Filipi
El Consejo cuenta en la actualidad con asociados de Argentina, Uruguay, Chile, República Dominicana, Brasil, Francia y Japón, entre otros y tiene los siguientes objetivos:
-Propender a la integración regional e internacional del sector lácteo relacionado al dulce de leche en cualquiera de sus variedades y afines.
-Fomentar la vinculación entre las instituciones, empresas y personas del sector de las diferentes regiones y países.
-Preservar de manera general los intereses del sector dulcero en el mundo.
-Crear y mantener un sistema de comunicación que permita contar con datos y elementos necesarios para una adecuada toma de decisiones.
-Facilitar la cooperación horizontal entre instituciones y empresas de los países asociados.
-Propiciar la mejor capacitación de mano de obra y técnicos en las diversas etapas de la cadena agroindustrial dulcera.
Para ampliar información hay que contactarse a través del email: [email protected]
El perfil de la nueva presidente
Ivana Nieto, la flamante presidenta es de Idiazábal, un pequeño pueblo en la provincia de Córdoba, pero actualmente vive en Rafaela, provincia de Santa Fe, donde revista en el Instituto Nacional de Tecnología Industrial
Es Ingeniera en alimentos, experta en análisis sensorial, y se especializa en quesos y dulces. Tuvo la responsabilidad durante dos ediciones de ser la coordinadora de jurados y evaluaciones de TodoLáctea, la mayor muestra lechera de Argentina, tanto en competencias de dulces de leche, como de quesos.
En una entrevista realizada por Revista Alfajorera dejó algunas definiciones de su decisión de vida ligada al dulce de leche y los alimentos
¿Cómo te diste cuenta de que tu profesión era algo que te gustaba y a lo que te querías dedicar?
Soy una apasionada de mi trabajo. Siempre fui bastante sensible con la percepción de los gustos y olores. Cursé mi carrera de Ingeniería en alimentos sin demasiado interés en el tema, puede haber sido la edad o que el foco estaba en otro lado. Pero un tiempo después hicieron una selección de pruebas con personal en el laboratorio donde trabajaba, y saque 100 %. Ahí me di cuenta que era buena percibiendo gustos, olores, describiendo sensaciones y ahí se despertó.
Tiempo después ingresé al INTI, y si bien mi ingreso se dio para un puesto de asesoramiento en sistemas de calidad en empresas, me fui orientando a la evaluación sensorial, y comencé a trabajar cada vez más y me formé en el tema. Hoy puedo decir que soy una apasionada en lo que hago, que cada vez más empresas le dan más importancia, porque entienden que un producto puede tener el mejor perfil nutricional, o hecho con el mejor calidad o tecnología, pero debe ser aceptado por el consumidor, y éste será quien decida si el producto será un éxito o un fracaso en el mercado.
-Contame en que se basa tu trabajo, pero de una forma que cualquiera pueda entender.
Mi trabajo consiste en trabajar con los sentidos y percepciones de las personas. Algunos forman parte de un panel entrenado, ellos se entrenan para poder dejar de lado sus gustos personales y otorgar números a un producto en función del salado, dulzor, amargor, entre otros. Como si fuera un termómetro, miden la intensidad de ese atributo dulce, por ejemplo. No dicen si les gusta o no, son sólo ensayos objetivos de medición como un aparato. Y existen otros ensayos con consumidores en los que les preguntamos si les gusta el producto, si lo comprarían, cuando lo usarían y en qué ocasiones. A partir de ahí, mediante análisis estadísticos sacamos conclusiones con cierta seguridad. Eso ayuda a estimar el éxito o fracaso, o si es necesario hacer cambios antes de lanzarlo al mercado, o cambiar el concepto de producto, un uso diferente, etc.
Esto permite hacer mejoras en los productos, y claro, eso los lleva a competir, y en esas competencias ganan los mejores. Por eso es tan importante disminuir esas subjetividades. Hay aspectos psicológicos que pesan mucho en las decisiones de compra o si te gusta o no un producto.
¿Qué rol cumple lo sensorial dentro de todo el análisis de alimentos?
Es muy importante, te permite corregir fallas, detectar su final de vida útil, su potencial de mejora, o para copiar el producto de la competencia. Adecuarlo a las necesidades de uso de los usuarios, etc. Cumple con roles infinitos.
-Tu fuerte son los quesos y el dulce de leche, ¿cómo llegas ahí?
Mi mayor especialidad son los quesos y dulces porque trabajo en INTI lácteos, es la matriz con la que más he trabajado, pero la evaluación sensorial es una ciencia que se aplica metodológicamente a muchos productos y no todos son alimentos. Puede aplicarse al desarrollo de la estimación del olor a nuevo en un auto, por ejemplo, imagínate todas las aplicaciones que tiene…
Por último y más personal, ¿Para vos, dónde va mejor el dulce de leche?… en un panqueque, comido a cucharadas, etc?
En cuanto a cómo comerlo, para mi va a cucharadas (risas). Así se percibe bien con todos los sentidos. Pero al igual que me pasa con los quesos, lo uso en todas mis comidas o preparaciones; un alfajor, un panqueque, un rogel, un mil hojas.
Pero todo con moderación, el Dulce de leche es un alimento saludable siempre y cuando no nos excedamos de la dosis. una cucharada sopera dentro de una dieta equilibrada es una bomba de dopamina cuando necesitamos un contacto con el placer por un ratito! así que una cucharada es bien tolerada.
Fuente: https://www.todolecheria.com.ar/