En platica con uno de los pocos lecheros que todavía reparten en la ciudad, Roberto Carlos García de la comunidad de Palmas, dijo que ya nadie compra la leche bronca, pues familias prefieren la leche pasteurizada, porque así se ahorran el tener que hervirla y más ahora que está tan caro el gas LP.
Recuerda don Roberto que en los ochentas entregaba 120 litros diarios de leche, pero a partir de 1995 se redujo la compra, porque las amas de casa se modernizaron para adquirir la leche pasteurizada, que fácilmente se consigue en la tiendita de la esquina.
Pese a estos cambios dice que todavía clientes que les gusta consumir la leche da bronca, reparte 10 litros a gente que no aceptan la leche pasteurizada, el entrego es cada tercer día, aunque el litro cuesta 15 pesos, más barata que la pasteurizada cuyo valor es arriba de los 20 pesos, por lo que la leche bronca es más barata y sabrosa, porque al cocerla forma una deliciosa nata.
Fuente: Pulso