Ante el bajo precio de la leche que es de entre 6 y 8 pesos, los lecheros de la región dejaron de ordeñar sus vacas, porque ya no es negocio hasta productores de queso ya que no usan y las cafeterías prefieren usar la leche comercial en cartón.
En algunos hogares, la leche “bronca” ya no está en los desayunos, ahora las amas de casa consumen la de soja, avena, espelta, coco, almendra, hay cada vez más tipos de bebidas vegetales, un alimento que hasta hace poco se denominaba leche.
Los lecheros definitivamente prefieren invertir en engordar sus vacas, y ya no levantarse temprano a ordeñar sus animales, un trabajo agotador, que realmente no les deja buenas ganancias.
“Quieren pagar 6 u 8 pesos por litro y hay gente que prefiere comprar leche en polvo en 14 pesos y en caja en 28 pesos un litro, cuando lo más nutritivo es la leche de vaca”.
También afecta que ahora la gente por seguir dietas bajas en grasas, el aumento de alergias e intolerancia a la lactosa, son algunas de las razones por las cuales cada vez más consumidores eligen estos productos vegetales, como las bebidas de avena, almendras, avellanas, arroz y quínoa.
Productores destacan que esta tendencia afecta directamente a la leche de vaca y refieren que leches vegetales, también conocidas como leches veganas o leches alternativas, no son productos lácteos.
“Solamente tienen un aspecto similar a la leche de origen animal, pero se trata de suspensiones de material vegetal desintegrado y disuelto en agua”, enfatizan.
Fuente: El Mañana de Valles