Leandro Galarraga, presidente de la Asociación Nacional de Productores de Leche (ANPL), sostuvo: “queremos garantías para poder trabajar y pensar en el futuro. Conaprole tiene una inestabilidad terrible y los productores apelamos a que todos los actores políticos sean conscientes de los perjuicios que están causando las medidas del sindicato y traten de hacer reflexionar al gremio”. Pidió que “toda la clase política y no solo el gobierno tomen medidas frente al conflicto”, porque “en estas condiciones es muy difícil que se pueda continuar trabajando”. Recordó que en estos años de dificultades para la lechería, quedaron por el camino 500 tamberos y afirmó: “si el gremio no recapacita, la venta de la cooperativa puede ser una opción para poder trabajar tranquilos”. Los precios de la lechería mejoraron, pero eso no se tradujo a mayor remisión de leche a planta.
-¿Cómo define la situación actual de la lechería uruguaya?
-Este año se ha venido recuperando, con precios que son más que buenos frente a los históricos. Estamos teniendo un invierno complicado en lo que a clima se refiere, seco y casi sin lluvias en junio, con fríos intensos que frenaron el crecimiento de las pasturas. Los costos de producción aumentaron porque se tuvo que producir leche en base a reservas y concentrados, pero también por la evaluación que hicimos con otros productores, las guacheras (donde se crían los terneros) y las inseminaciones artificiales del rodeo han venido muy bien. Realmente el ganado Holando en clima seco y fresco se comporta muy bien, con producciones aceptables, pero tuvimos un costo de producción más alto que el habitual. Se está generando un margen positivo pero muy acotado.
– Menciona el incremento de los costos de producción ¿qué está pasando hoy con insumos básicos para producir leche como los fertilizantes?
– Los precios se estabilizaron, incluso hay algunos que bajaron. El impacto más fuerte se registró en la urea, donde tuvimos precios de US$ 1.200 por tonelada. Felizmente, ahora, ese insumo tan importante para potenciar la primavera bajó a alrededor de US$ 700 por tonelada. A su vez, se está viendo algunas bajas de precios para el maíz. Creemos que el techo en la suba de costos ya se alcanzó y los insumos están tendiendo a bajar. Si esta situación continúa, sería muy favorable para el sector lechero.
-Los mejores precios para el sector no están generando mayor volumen de leche ¿lo ve de la misma forma?
-Es así. En lo que es el ejercicio de Conaprole venimos 1% por debajo al comparar con el anterior. Históricamente la lechería venía creciendo entre 3% y 4%, este año la ecuación se dio vuelta. Hay que tener en cuenta que el principal remitente a Conaprole, como lo era Olam (capitales neocelandeses con 36 tambos y más de 66.000 vacas) se fue de Uruguay y eso tuvo un impacto muy importante en lo que es la remisión de leche a planta. De todos modos, venimos cerrando un año con menos leche que el anterior.
-¿Se puede volver a crece 3% o 4% como en años atrás?
-Si las condiciones de precios siguen acompañando el productor lechero siempre apuesta a crecer. Eso se demostró históricamente. La producción se vino superando todos los años. Soy optimista en que si están las condiciones dadas el sector lechero continuará creciendo en producción. Felizmente, ese insumo tan importante para potenciar la primavera (por la urea) bajó a alrededor de US$ 700 por tonelada. A su vez, se están viendo algunas bajas de precios para el maíz. Creemos que el techo en la suba de costos ya se alcanzó y algunos insumos están tendiendo a bajar. Si esta situación continúa, sería muy favorable para el sector lechero.
-La conflictividad laboral en el sector, especialmente las medidas gremiales impulsadas en Conaprole han generado la reacción de los productores, que son los dueños de la cooperativa. ¿Cómo analizan el conflicto?
-Es difícil medir el daño económico que nos hacen a los productores, pero nos pegan duro, porque generan desabastecimiento, se vende menos y eso se reflejará en el precio. El mercado interno es el que mejor valoriza la leche y los conflictos provocan un daño muy grande en toda la cadena láctea, porque los funcionarios, el almacenero y el distribuidor también pierden. Se perjudica la mano de obra uruguaya porque los espacios vacíos que van quedando en las góndolas de los comercios, son ocupados por productos de la la región. Si se revisan las góndolas, se puede ver que están llenas de productos lácteos argentinos.
-Frente a esa conflictividad los productores plantearon varias veces la posibilidad de vender Conaprole. ¿Se sigue manteniendo esa idea frente a esta conflictividad en el sector?
-Estamos cansados de los conflictos en el sector lácteo. No nos gusta nada la conflictividad permanente y queremos trabajar en paz. Los conflictos son bastante continuos en Conaprole y en el resto de las industrias. La posible venta de Conaprole se manejó en otras ocasiones y actualmente, conversando con los productores y cuando se dan estos conflictos con empleados que tienen salarios privilegiados para lo que es el sector laboral del Uruguay y con condiciones de trabajo muy buenas, vuelve a resurgir la propuesta de vender la cooperativa.
En estos años los productores perdimos mucho dinero, quedaron por el camino 500 tamberos. Si el gremio no recapacita, la venta de la cooperativa puede ser una opción para que los productores puedan trabajar tranquilos.
-¿Cuál es la visión de los productores sobre los salarios en Conaprole?
– Cualquier sueldo en Conaprole son tres o cuatro salarios mínimos. No estamos hablando de sueldos de un salario mínimo, como el que tienen 650.000 uruguayos. Hablamos de una clase trabajadora privilegiada que tiene excelentes salarios y excelentes condiciones laborales. La prueba está en que ninguno deja Conaprole por un trabajo mejor. Aún así, tenemos un nivel altísimo de conflictividad y una queja permanente del gremio, porque no están satisfechos nunca con su trabajo.
-Esta semana se reunieron con el Presidente de la República y recibieron el respaldo del gobierno frente al conflicto ¿qué esperan del Ejecutivo y de la clase política?
-El sector político es el que tiene que tomar medidas e intentar que este gremio reflexione, porque en este camino de conflictividad no vamos a llegar a ningún lado. Nos reunimos con distintos actores del gobierno, como es el caso del Ministro de Trabajo y Seguridad Social (Pablo Mieres), con la Cámara del Trabajo de Diputados y luego con el Presidente de la República, Luis Lacalle Pou. En la misma línea pedimos audiencia al PIT CNT y al presidente del Frente Amplio, Fernando Pereyra. No hemos tenido respuestas del PIT CNT. Consideramos que tenemos que llevar nuestra preocupación y planteos a todo el espectro político del Uruguay.
– ¿Si el sindicato no firma la cláusula de paz propuesta no habría acuerdo?
-Sin esa cláusula no lo habrá. Es inviable. Los productores se lo dejamos muy claro desde el primer momento a las autoridades de la cooperativa. Queremos garantías para poder trabajar y pensar en el futuro. Queremos que los funcionarios sigan teniendo las mejores condiciones de trabajo para que puedan trabajar tranquilos y que no haya esta conflictividad permanente que genera incertidumbre y afecta también a los productores lecheros. Conaprole tiene una inestabilidad terrible y los productores apelamos a todos actores políticos sean conscientes de los perjuicios que están causando las medidas del sindicato y traten de hacerlo reflexionar. Queremos que se firme un convenio salarial favorable, como lo propuso el gobierno, para que los tamberos podamos trabajar tranquilos.
-¿Cómo ve hoy al Inale? ¿Qué espera del Instituto?
-Es un Instituto estratégico para la lechería y todo el sector. Creemos que hay que fortalecerlo. Cuando se creó se le adjudicó una partida fija en pesos, pero producto de la inflación y la suba de costos, hoy está desfinanciado. Por eso tenemos que trabajar todos para conseguir un apoyo económico y fortalecer al Inale, para que sea la herramienta de propuestas. Todas las gremiales queremos discutir y proponer cómo se debería desarrollar la lechería y discutirlo con la clase política.
-¿Cómo toman la renovación de la rebaja del 15% en las tarifas de UTE para el sector lechero?
-Valoramos mucho el esfuerzo que se hace con esta medida. Cuando nos reunimos con el presidente Lacalle Pou nos estaba esperando con el Decreto. Veníamos trabajando desde antes de fin de año para conseguir el beneficio y se había demorado en los distintos Ministerios. Felizmente ya lo habían firmado todos los ministros y quedaba la firma del Presidente de la República para que quedara operativo. Lacalle Pou se comprometió a que el beneficio quedaría operativo este mes y será retroactivo a enero. Quedará vigente todo el 2022 en las mismas condiciones como lo veníamos usufructuando desde 2017. Es una gran ayuda para el sector y para paliar los costo, porque la energía eléctrica pesa mucho en los tambos. Es un costo importante, pero a la vez una necesidad por los equipos que se utilizan en los tambos del Uruguay.