Colombia estaría ante la posibilidad de un aumento en el precio de la leche al consumidor atribuida al verano, las altas temperaturas y al fenómeno de El Niño, que traería consecuencias negativas y afectarían la producción de leche en el país.
Así lo advierte en su última columna de opinión Óscar Cubillos Pedraza, economista y director de investigaciones económicas de Fedegán, el gremio cúpula que mide el pulso del comportamiento del sector ganadero bovino del país incluidas la producción de carne y de la leche en Colombia.
“Hay que tener presente que uno de los primeros afectados por variables climáticas es el sector lechero, y si bien existen notorias diferencias en la productividad regional, el clima seco pegaría en todas las regiones del país”, plantea la columna titulada Ahora sí llegó el verano, y, al INVIMA gracias.
Se refirió a algunos antecedentes y plantea que lejos de las predicciones sobre el fenómeno de El Niño, de su ocurrencia y severidad, el verano parece haber llegado en su época típica y normal, esto es, a finales de diciembre e inicios de enero. Recordó que en los años 2020, 2021 y 2022 estas temporadas de verano no fueron secas sino estuvieron pasadas por lluvias, por lo que pareciera que los productores se estaban olvidando de su existencia.
“Ya se presentan temperaturas por encima de lo normal, así como heladas; aunque los pastos, forrajes y cultivos aún no lo expresen, pero será cuestión de un par de semanas para que se noten los daños en las praderas y unos días más para ver impactos en las cosechas de productos agrícolas, lo que sin duda generará afectación de precios”, explica.
Según Cubillos Pedraza, en dicho escenario el primer indicio de aumento se daría en el precio del litro de leche pagado al productor, evento que sucedería por las respectivas y continuas presiones al alza, “más si la DIAN sigue con problemas en sus plataformas informáticas, lo que ha limitado la importación de leche en polvo”, manifiesta.
Que no ingrese leche importada no es problema para el sector y, por su parte, que el precio al productor mejore es beneficioso en primera instancia.
No obstante, advierte, que tales alzas se trasladarán al consumidor de manera casi inmediata, afectando el consumo, que también se vería irrumpido por subidas en el precio de otros alimentos por cuenta de la escasez que genera el verano.
Ojo con las mezclas
Plantea asimismo que, “en un escenario de escasez de leche seguramente varios inescrupulosos ya andan pensando en hacer mayores mezclas de poca leche y mucho lactosuero y agua, para hacerlo pasar como leche al cien por ciento”.
Reiteró que por fortuna el INVIMA en días pasados expidió una normativa que solo permite que un litro de leche líquida vendido al consumidor contenga 30 miligramos de lactosuero, lo que sin duda beneficia a consumidores y productores de leche.
Inflación repuntaría
Cubillos expuso que se debe tener en el radar que Colombia en 2021, 2022 y parte de 2023 estuvo expuesta a una presión inflacionaria internacional, pero que desde abril del año anterior mostraba señales de ceder en el ámbito interno, tanto así que en el pasado diciembre el Banco de la República ligeramente bajó las tasas de interés ante menores expectativas inflacionarias”.
“Sin embargo, con el verano tradicional y con la incertidumbre si se extienda bajo un fenómeno de El Niño, la inflación repuntaría poniendo en aprietos de nuevo al crecimiento del país y en definitiva haciendo que no continúen bajando las tasas de interés que se encuentran aún en altos niveles”, puntualizó.