Cooperativas y pymes advierten sobre sobreoferta, altos costos y falta de respuesta oficial.
La crisis que atraviesa la industria láctea argentina continúa profundizándose. En los últimos días, cooperativas y pymes del sector emitieron comunicados conjuntos alertando sobre un escenario “sumamente complejo e insostenible”, marcado por la caída de la rentabilidad, el aumento de costos y la falta de respuestas concretas por parte del Estado.
Las empresas señalan que el incremento sostenido en la remisión de leche hacia las plantas industriales está generando una sobreoferta difícil de absorber en el mercado interno. Esta situación, combinada con costos operativos crecientes —energía, transporte, insumos y salarios—, deriva en una fuerte presión sobre las pequeñas y medianas industrias que no logran trasladar los aumentos al precio final.
A esto se suma un exceso de stock de quesos y derivados, reflejo de un consumo interno estancado y de la dificultad para colocar excedentes en los canales de exportación. Las entidades reclaman medidas urgentes de acompañamiento que contemplen créditos blandos, políticas de promoción y un marco de previsibilidad para sostener el empleo y la producción.
El comunicado también subraya la necesidad de diálogo interinstitucional, reclamando coherencia entre las decisiones políticas y la realidad productiva de las economías regionales. Según las cooperativas, sin una acción coordinada entre Estado, industria y productores, el sistema lácteo argentino podría enfrentar una pérdida estructural de capacidad instalada.
Este nuevo reclamo se suma al de APyMIL y otras asociaciones que en las últimas semanas advirtieron sobre el deterioro del sector y la urgencia de construir soluciones colectivas.