La producción actual de las vacas lecheras se ha ido adaptando a las necesidades que el mercado exige, por eso dar a las terneras leche adecuada en el proceso de crecimiento es fundamental. Conozca cuál puede cubrir las necesidades de los animales.
Ese mercado ha hecho que la producción se intensifique con determinados valores de grasa y proteína que están equilibradas para la elaboración de productos destinados al consumo humano, pero lo que realmente es necesario es que se ajusten a las necesidades del ternero.
La Revista Frisona explica que estos desequilibrios a la hora de cubrir las necesidades del ternero, junto con la propia variabilidad de producción de los animales debido a cambios de temperatura, alimentación, pueden dar pie a menores índices de crecimiento o a diarreas mecánicas, haciendo susceptible al ternero de padecer patologías y a retrasar el desarrollo.
Por eso, es frecuente administrar leche de deshecho que no puede comercializarse por tener alto contenido en células somáticas, residuos de antibióticos, etc. Lo anterior, conlleva un mayor riesgo sanitario para el terreno.
Mónica Langreio en su investigación en la revista mencionada asegura que, a diferencia de la leche entera, un lactoreemplazador ofrece al ternero un alimento equilibrado, formulado específicamente para cubrir sus necesidades, favoreciendo un crecimiento optimo y un desarrollo del potencial genético.
Una ventaja de este producto es que la composición es la misma a lo largo del tiempo, previniendo problemas digestivos, siendo además un alimento controlado desde el punto microbiológico con que se evita el posible riesgo de transmisión de ciertas enfermedades de la madre al ternero a través de la leche.
Pero muchos se preguntarán cuánto y cómo se debe administrar este producto, a lo que la experta menciona que existen planes de raciocinio a través de los cuales se pueden alcanzar objetivos como ayudar a conseguir un crecimiento optimo con el fin de que el animal se pueda cubrir lo antes posible con peso y edad adecuada.
“Después de la administración de calostro durante los 2-3 primeros días, aportamos una toma intermedia exclusivamente de agua y rehidrantante para comenzar con el plan de leche maternizada”, menciona Langrerio.
Por esta razón es importante destacar que los planes de racionamiento deben adaptarse a cada explotación. El volumen de leche y tiempo variarán ligeramente en función del tipo de lactoreemplazante que se utilice, el pienso de iniciación, las instalaciones, el manejo, la velocidad de crecimiento que se desee, entre otros.
Sin embargo, todos estos siguen el mismo patrón de administración basado en una curva con forma de campana en la cual, durante las primeras semanas se comienza con dos litros de leche administrados en dos dosis, para ir aumentando paulatinamente esta cantidad.
En palabras de Langrerio, “normalmente se alcanza el volumen máximo de administración la sexta semana y a partir de este momento es recomendable disminuir el volumen de leche administrado hasta la octava semana, por lo que la cantidad es muy pequeña con el objetivo de facilitar el destete”.
Durante estos días el ternero estará comiendo alrededor de 2 kilogramos de sólido, cantidad suficiente para asegurar una transición correcta al destete.
En este orden de ideas, la experta menciona que hay ciertos puntos importantes en los que se debe fijar el productor a la hora de comprar los lactoreemplazadores, teniendo en cuenta que existen varios tipos en función de la base de su composición, ya sea leche desnatada en polvo, suero filtrado o ultrafiltrado.
Dependiendo de lo expuestos que estén los animales a los factores ambientales como frío, humedad, calor, el volumen de leche que se le vaya suministrar al animal, la calidad de preparación de la mezcla y la velocidad de crecimiento, se debe elegir un tipo de leche u otro.
Es por esto que existen tres situaciones donde es altamente recomendable elegir leches con alto contenido de leche desnatada en polvo y alto porcentaje de proteína láctea:
- Cuando más expuestos estén los terneros a condiciones adversas.
- Cuando en la finca se administren volúmenes pequeños de leche.
- Cuando se quiera aportar al ternero mayor velocidad de crecimiento.
Además, al ser productos de alta digestibilidad y muy energéticos, el ternero logrará estar mejor preparado para superar situaciones de estrés, aunque es importante recalcar que este tipo de productos requieren de un buen manejo de la mezcla.
La experta dice que se pueden conseguir resultados muy similares con leches bajas en leche desnatada en polvo o incluso a base de suero lácteo. Sin embargo, en estos casos es muy recomendable:
– Contar con instalaciones sin corrientes, humedad ni temperaturas extremas.
– Administrar mayores volúmenes de leche.
Fuente: CONtextoGanadero