El cierre de los contratos de compra de leche en el mundo no están arrojando buenos resultados para los proveedores de materia prima ni tampoco para las industrias lácteas. Así lo indica un informe elaborado por el portal Dairy Business, que acompaña la firma de la analista Sarina Sharp.
Tal como indicó también un informe difundido por el OCLA local, «los mercados de productos lácteos están tambaleándose después de una dura semana. La leche Clase III de marzo obtuvo un aumento de 3 centavos, y la Clase IV de noviembre y diciembre agregó unos centavos. Todos los demás contratos de leche en el tablero terminaron en rojo».
En el portal, que cuenta con sede en Indianápolis, Estados Unidos, se agregó que «los contratos Clase III de mayo a julio y Clase IV de abril a septiembre perdieron 30% o más. El USDA anunció el precio de la Clase III de febrero a u$s 17,78 por quintal, con la Clase IV a u$s 18,86. Los futuros pronostican más de lo mismo, con la leche Clase III por debajo de u$s 18 y la Clase IV por debajo de u$s 19 durante otros tres meses».
Aquí el informe completo publicado por Dairy Business: para poder analizarlo en detalle.
Se indicó además que «eso simplemente no es suficiente para pagar las cuentas. Las tasas de descarte son altas y hay una larga lista de lecherías a la venta en las principales casas de subastas. Pero pasará algún tiempo, quizás seis meses o más, antes de que este dolor en la granja se traduzca en menos leche».
También se consignó que «por ahora, hay leche en abundancia. En el corazón del país, los excesos de leche se vendieron por hasta u$s 10 en clase por décima semana consecutiva. Los queseros siguen trabajando duro. La producción de queso de enero superó los 1.200 millones de libras en enero, un 3,2% más que el año anterior».
«El mercado parece estar buscando un fondo. Pero es probable que una mayor ventaja sea limitada a corto plazo -se explicó-. Los precios de la leche en polvo son lo suficientemente bajos como para garantizar un consumo saludable, pero los compradores son conscientes de que la leche con descuento mantiene llenas las secadoras y es probable que el excedente de leche empeore durante la primavera. Los importadores y los usuarios domésticos han ralentizado las compras, con la esperanza de oportunidades aún más baratas en el futuro».
Asimismo, tal como expresó, la nota publicada en el portal: «las recolecciones de leche de Oceanía se animaron un poco en enero, con mejoras en Nueva Zelanda que compensaron las pérdidas en Australia. Es probable que ambas naciones registren un déficit en la temporada 2022-23, con recolecciones hasta la fecha del 6,6 % en Australia y del 2 % en Nueva Zelanda».
«Pero la modesta recuperación en Nueva Zelanda en enero probablemente signifique más competencia en el mercado mundial de leche en polvo. Con la producción de leche en aumento en Nueva Zelanda, Europa y los Estados Unidos para comenzar el año, 2023 se perfila como mucho más difícil que 2022», dijo.
Fuente: Infortambo